El ser humano y el error guardan una estrecha relación. De hecho, del reconocimiento del error nace el avance en cualquier plano del ser humano. Digamos que el error es el mejor maestro que podemos tener, en todos los sentidos. En el plano de las relaciones, especialmente sentimentales, los errores de pareja se convierten en nuestros guías para saber qué no debemos volver a hacer o en qué tipo de situaciones no queremos volver a vernos envueltos.
Principales errores de pareja
Poseer a la otra persona
Frases como “Eres mío/a” denotan un sentimiento de posesión y control sobre el otro que únicamente no deriva en fracaso si la persona sometida desea ese rol. Esto se da, aunque por norma, no todos deseamos ser sometidos 24 horas al día. Incluso la otra parte, la controladora, se cansa de ser siempre quien tenga a alguien a su disposicion. Irónicamente, al controlar a alguien estamos saciando nuestro deseo de ser controlados. La parte que se somete también sacia su deseo de ser sometido, dado que en su vida diaria no tiene la opción de sentirse de ese modo.
Celos
Derivado de la posesión y el control, la materialización social de esto son los celos y otro término muy relacionado: la envidia. En algunos contextos, por desgracia, están bien valorados. Hay quienes incluso entienden los celos y la envidia como consecuencia de querer a alguien. En esa mala interpretación del querer está concebido poseer a la otra persona, controlarla, limitarla, decirle lo que debe hacer y lo que no.
La pregunta clave sería:
Si los celos y la envidia son tan tóxicos, ¿por qué socialmente están validados y reconocidos?
Aquí tienes mi explicación:
El mayor error: no conocer realmente a tu pareja
Éste es, con diferencia, el mayor error de la pareja moderna. No sabemos realmente cómo es la persona con quien estamos saliendo o compartiendo nuestra vida si sólo nos fijamos en lo que nos gusta de esa persona.
Conclusiones
Errar es la única forma de aprender. Por tanto, no obvies tus errores. Si te fijas en ellos tendrás una guía certera de dónde fallas y, detectado esto, tendrás un mapa preciso de dónde mejorar para no volver a tropezar con el mismo obstáculo.
Como ser humano no tienes ninguna obligación de ser perfecto, tan sólo tienes el deber de intentar ser feliz. Para ello, es fundamental estar en compañía de personas que te sumen. Recuerda que todos somos imanes y atraemos a nuestra realidad a determinados tipos de personas. Si atraes personas que te hieren o con las que tienes una relación de pareja nociva la pregunta que debes hacerte es:
¿Por qué atraigo a estas personas?
Si incides reiteradamente en el mismo patrón tienes una lección que aprender. Generalmente la lección es:
Toma el control de tu vida
