Los investigadores de la Universidad de California en Irvine han identificado el interruptor químico que activa el mecanismo genético que regula el reloj corporal interno.Añadieron que el interruptor ofrece un objetivo para el desarrollo de nuevos fármacos para tratar los trastornos del sueño y los problemas relacionados.
El estudio halló que un solo aminoácido desencadena los genes que regulan los ritmos circadianos. Debido a los complejos genes involucrados, los investigadores dijeron que les sorprendió encontrar que un solo aminoácido activaba el mecanismo del reloj corporal.
Una modificación en un solo aminoácido en la proteína BMAL1 activa el proceso genético que tiene que ver con los ritmos circadianos, según encontraron los investigadores. Si la modificación de ese aminoácido sale mal, el mecanismo de activación genética puede funcionar mal, lo que causa trastornos relacionados con el ritmo circadiano.
“Debido a que la acción desencadenante es tan específica, parece ser un objetivo perfecto para compuestos que podrían regular esta actividad. Siempre es increíble ver cómo el control molecular es tan preciso en la biología”, afirmó en una declaración preparada el autor del estudio, Paolo Sassone-Corsi, profesor distinguido y catedrático de farmacología.
Sassone-Corsi actualmente evalúa anticuerpos que puedan dirigirse a la actividad de este aminoácido en la proteína BMAL1.
El estudio aparece en la edición del 13 de diciembre de Nature.