1) Donde hay un obstáculo ven una oportunidad
Un obstáculo es algo muy bueno. Es leído como un reto y, por tanto, una oportunidad para dejar constancia de la valía personal.
2) No huyen de los retos, los crean
Necesitan el reto como forma de autoafirmación, como agua para calmar su sed de conquista. Por ese motivo buscan retos constantemente y si no los encuentran los crean. El reto no les da miedo, les motiva.
3) Buscan un punto de vista diferente
Ven la solución a un problema de un modo particular, a través de una visión única que aúna originalidad y dificultad a la altura de su nivel de afrontamiento.
4) Cada día buscan algo más
No se conforman, de hecho, se cansan rápidamente de lo mismo. Por ese motivo necesitan reinventarse a sí mismo a través de las metas que consiguen. Lo que hoy es un éxito mañana es un paso justo antes del éxito, por lo que no les vale.
5) Retos simultáneos
Son capaces de simultanear varios retos. Se aburren y se frustran buscando conseguir sólo un objetivo. Es por ello que siempre tienen varias ideas o líneas de trabajo sobre las que invertir sus esfuerzos en busca de un resultado sorprendente.
6) No dudan de su éxito
Su confianza no tiene límites. No dudan de que conseguirán lo que se proponen. En todo caso, pueden dudar de cuándo lograran la meta, pero todos sus esfuerzos están orientados al objetivo, por lo que es cuestión de tiempo que lo logren.
7) Viven en su mundo
Para ellos la realidad tiene unas normas que no se aplican a los demás, ya que es una proyección de su actividad mental, diferente a la de la mayoría.
8) Eligen por qué luchar
Se buscan retos lo suficientemente atractivos para estar enganchados a la lucha por conseguirlos. Jamás eligen algo que no les interese por sencillo, simple o aburrido.