Es posible que en las cuatro preguntas sobre qué hemisferio manda haya empate entre izquierdo y derecho. En ese caso, eres un caso de lateralización cruzada, es decir, no tienes un hemisferio dominante sino que las funciones están distribuidas de forma homogénea entre hemisferios. Por ejemplo, puede ser que escribas con la mano izquierda pero chutes un balón con la pierna derecha.