El jefe frente al empleado es una de las relaciones más desiguales en la sociedad actual. El jefe tiene el poder sobre la salud económica del empleado. De ésta salud dependen los seres queridos del empleado. Por tanto, es normal que la figura del jefe genere odio y afecto a partes iguales en función de cómo repercute su comportamiento sobre la satisfacción o insatisfacción de la familia.
La desigualdad de esta relación genera una carga emocional similar al miedo en ocasiones, en otras más levemente disfrazada de tensión. En cualquier caso resulta difícíl expresar un comportamiento natural ante una figura de “tanto poder” para el futuro de uno mismo. Esto genera un comportamiento en lo que lo principal es no molestar diciendo nada contraproducente.
[Tweet “Análisis de los gestos de Kim Faura (Telefónica) y sus empleados/as”]
Con este caldo de cultivo la entrevista que hizo Jordi Évole a Kim Faura frente a sus empleados es una mina de oro de gestos no verbales de poder del jefe frente a gestos de autocontrol y miedo a molestar de los empleados, tal y como recoge el siguiente video análisis.