Tú decides cuál es la meta de tu comunicación sexual:
- Lanzarte a hablar con esa persona que te gusta
- Conocer al hombre/mujer de tu vida
- Tener sexo
- Tener una buena conversación
- Sentir que conectas con alguien
- Sentir que puedes gustar a alguien
Cualquier meta es válida siempre que ambas personas estéis de acuerdo en llegar al mismo punto. Eso de ligar devorando chicas no va conmigo y no es lo que enseño en mis talleres. Lo que enseño es que tú seas la mejor versión de ti mismo y hagas lo que tú deseas, no lo que “se supone que deberías hacer”.
Partimos de ese punto. ¿Qué quieres? ¿Quieres algo (lo que sea) con otra persona? ¿No te atreves a ir directamente hacia quien te gusta?
Aunque te parezca que estás muy lejos de conseguir conectar con esa persona estás tan sólo a 2 pasos:
1) ¡Échale huevos!
¿Cuántas veces has intentado que quien te gusta te lea la mente y venga a ti y te diga precisamente lo que deseas oír? Pese a ser algo tremendamente improbable es algo que las personas no dejamos de hacer.
¿Por qué no tomas el camino más directo y sencillo? Acércate y habla. ¡Échale huevos! Llevar una careta de “me da igual” lo único que hará es que te creas que no eres capaz. Haz cosas que te hagan sentir vivo en lugar de fantasear con ellas.
2) Saca el máximo partido a tus virtudes y crea nuevos recursos para lograr mejorar tu comunicación sexual
Seguramente tu pensamiento trampa te esté jugando ahora una mala pasada y te esté convenciendo de que no vas a lograr nada porque no eres guap@ ni atractiv@.
¿De qué te va a servir ser guap@ si no tienes juego para mantener una relación? La belleza inicia muchas relaciones. Abrir la boca y desvelar que no tienes juego arruina la mayor parte de ellas.
Si no eres el típico guapo/a felicidades. No tienes más opción que descubrir tu juego y desplegar tus virtudes, esas que estarían atrofiadas si no fueran imprescindibles para tu éxito. Esa es una ventaja que l@s guap@s jamás experimentarán. Tan sólo se darán cuenta de que algo falla cuando su belleza externa va decayendo.
Saca ya tu mejor versión. Recuerda. Son tan sólo 2 pasos.
1) ¡Échale huevos!
2) Saca el máximo partido a tus virtudes y crea nuevos recursos para lograr mejorar tu comunicación sexual